Ismael «El Mayo» Zambada, histórico líder del Cártel del Pacífico, enfrenta 17 cargos relacionados con el narcotráfico en Estados Unidos.Ismael «El Mayo» Zambada, uno de los líderes más notorios del Cártel de Sinaloa, se declaró no culpable durante su primer juicio en Nueva York.
El narcotraficante de 76 años fue detenido en julio pasado en circunstancias que, según él, fueron parte de una emboscada orquestada por Joaquín Guzmán López, hijo de su antiguo socio Joaquín «El Chapo» Guzmán.
Zambada enfrenta 17 cargos, entre ellos, tráfico de drogas —incluyendo cocaína, heroína y fentanilo—, tráfico y posesión de armas, y empresa criminal continuada.
La fiscalía de Nueva York ha solicitado su detención permanente debido al riesgo de fuga y su peligrosidad, argumentando que no existen condiciones que garanticen la seguridad de la comunidad si fuera liberado antes del juicio.
El proceso judicial es conducido por el juez James Cho, quien determinó que Zambada deberá permanecer en custodia hasta el juicio. La audiencia inicial se llevó a cabo este viernes a las 10:00 horas, en la que Zambada fue informado de los cargos en su contra.
El narcotraficante fue trasladado desde Texas a Nueva York luego de ser capturado el 25 de julio en el aeropuerto de Santa Teresa, Nuevo México.Zambada nunca había sido arrestado en sus más de 40 años como uno de los principales líderes del narcotráfico mexicano.
En una carta posterior a su detención, afirmó que fue engañado y secuestrado por Guzmán López y llevado por la fuerza a Estados Unidos.
Sin embargo, las autoridades estadounidenses habían emitido al menos 16 órdenes de acusación en su contra, siendo la más reciente en febrero de 2024, por cargos adicionales relacionados con el tráfico de fentanilo, una droga que ha contribuido a una severa crisis de opioides en Estados Unidos.
Este juicio es considerado uno de los más importantes en la lucha contra el narcotráfico en Estados Unidos, dado que Zambada, junto con «El Chapo» Guzmán, es una de las figuras clave en la estructura del Cártel de Sinaloa.
Si es encontrado culpable, podría enfrentar una condena de cadena perpetua, siguiendo los pasos de su antiguo socio, actualmente preso en una prisión de máxima seguridad en Colorado.
Con información de AFP.