Gerardo Valdivieso Parada
Unión Hidalgo, Oax.- El pasado jueves 15 de agosto dos inspectores de la Procuraduría del Protección del Ambiente del Estado de Oaxaca (PROPAEO) fueron amenazados con quemarlos vivos, cuando acudieron a colocar carteles de clausura en el banco de piedra “El Barrancón”.
Los “defensores” de la extracción de material pétreo para la rehabilitación de la línea K del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT), amenazaron con un arma de fuego a los inspectores y también a un ciudadano de la comunidad que les había guiado hasta el banco de piedra.
Los dos inspectores de la PROPAEO antes de proceder a colocar las etiquetas de clausura, tuvieron la consideración de avisar a los que operaban el banco de piedra para que retiraran la maquinaria, antes de que fuera clausurada a través de un vigilante que se encontraron.
La alerta del vigilante del lugar hizo que arribaran otras once personas, que no sólo les avisaron a los de la PROPAEO que no se iban a retirar las maquinas, sino que además los amenazaron con quemarlos ahí mismo.
Los incrédulos inspectores trataron de dialogar con sus amenazadores al explicarles su misión y el desacato en que estaban cayendo al seguir explotando el banco de piedra, primero fueron amenazados con retenerlos para al final ser corridos del lugar en su vehículo oficial sin dejar ir al guía.
La persona que hizo el favor de guiar a los inspectores, se le intentó ahorcar por uno de las 12 personas y entre varios lo tiraron y golpearon, para luego amenazar con matarlo ahí mismo y luego enterrarlo para que nadie lo localizara.
Apuntado por un arma, también se procedió a sobornarlo y cuando esto no tuvo efecto, procedieron otra vez a amenazarlo de muerte, retenerlo quitándole sus celulares en las que eliminaron información y procedieron a checar sus contactos.
Le aseguraron que si volvía a asomarse a la zona en donde se ubica el banco de piedra le dispararían sin consideración. Finalmente lo trasladaron a la población, sin dejar de amenazarlo.
Las tres personas afectadas por aparte procedieron de forma legal contra sus agresores.
La empresa encargada de las obras de la línea K del CIIT, GFS, informó a la PROPAEO que no cuenta con ninguna relación con la explotación del banco de piedra El Barrancón, que cuenta con una suspensión de una juez federal en la zona llamada Loma Lope.